EN EL RECUERDO Ramón y su pasión por enseñar básquetbol - Caleta Olivia - El domingo, se recibió la triste noticia de la desaparición física de Ramón Bonino. El popular “Flaco” quien por muchos años fuera el maestro de todos aquellos que jugaron al básquetbol en Caleta Olivia y la provincia. Se fue un maestro, un luchador y que siempre va a estar en el recuerdo de todos. Te vamos a extrañar mucho flaco querido. A manera de homenaje, La Prensa de Santa Cruz, reproduce una nota realizada con Ramón sobre un proyecto que tenía previsto implementar.“Con el básquet quiero sacar a los chicos de la calle”Ramón Osvaldo Bonino, nació en San Martín (provincia de Santa Fe) un 22 de Marzo de 1943 y es un hombre que toda su vida se la ha dedicado al básquetbol.Jugó profesionalmente en clubes reconocidos del país, como San Andrés y San Lorenzo de Almagro, entre otros, y se dio el gusto de jugar junto a una figura del básquetbol nacional, “El Tola” Cadillac.
Hoy, con cuarenta años de trayectoria le llegó su máximo premio: fue designado por la Secretaría de Deportes de la Nación para desarrollar un proyecto que presentó: Enseñar la actividad en la Escuela N° 36, con el objetivo de brindar contención a través del juego. Fue el único elegido en Santa Cruz para desarrollar este propósito.
La Prensa de Santa Cruz (LPSC):
¿Fuiste elegido el único santacruceño para participar en un proyecto escolar deportivo?Ramón Bonino (RB): Sí. Fui designado por el Proyecto Centro de Desarrollo Deportivo Escolar y elegí la Escuela 36 “Antártida Argentina” para hacer el primer proyecto en la provincia de Santa Cruz. En la provincia soy el único representante por este año, porque son seis meses, de julio a diciembre, para trabajar con chicos de 6 a 13 años. Ahora tengo que viajar porque voy a unas jornadas de capacitación y aparte la escuela recibirá elementos deportivos por una suma de mil pesos.
LPSC: ¿Cuál es el proyecto que encararás con los estudiantes?RB: El proyecto es hacer mini básquet y tendrá como finalidad sacarlos de la calle y que estén dentro de un gimnasio. Esa escuela, donde ya había trabajado, necesita este tipo de trabajos. Anteriormente estuve trabajando con 400 chicos, pero después se terminó. Esperamos que podamos continuar y el año que viene le otorguen a más escuelas. Desde Nación dan uno por provincia y la verdad que nos sorprende que se la hayan dado a Caleta Olivia, teniendo en cuenta que Río Gallegos siempre se lleva todo.
LPSC: ¿Esperabas esta designación?RB: Me enteré porque me llamaron desde Deportes de Nación hace quince días, diciéndome que por mi trayectoria había sido designado para empezar en la provincia este proyecto. Acepté y me dijeron que tengo que viajar a Buenos Aires.
LPSC: Además de enseñarle el juego del básquet, los chicos con los que vas a trabajar, ¿necesitan mucha contención no?RB: Si, por eso hice un estudio del mini básquet, porque es algo importante. Al chico hay que enseñarle a jugar libremente. Con esto podrán jugar libremente sin pensar en ganar o en obtener un resultado. Demasiados problemas ya tienen en la casa y en la cabeza para enseñarles tácticas del juego. He recopilado muchos datos de un profesor que tuve, Álvarez, donde aplica mucha psicología en un libro que publicó. Además sumo mis cuarenta años de experiencia en el básquetbol. El proyecto está para aplicar en las escuelas, teniendo como objetivo la motivación personal y no en triunfar. Hay que enseñar a jugar libremente.
LPSC: ¿La idea es expandir este proyecto en el resto de las escuelas?RB: Esto es lo que quiero pedir y lo solicitaré en mi viaje a Buenos Aires.
LPSC: En tus 40 años de trayectoria, ¿este es tu proyecto más significativo?RB: Es distinto, porque este surge de Nación. También según lo que me dijeron se da en varios deportes, pero en básquetbol es el que presenté para la provincia. Espero que después se de para todas las localidades de la provincia y que no se centralice solamente en Río Gallegos.
LPSC: Para aquellos que no conocen tu trayectoria, ¿cuándo comenzaste a jugar al básquetbol?RB: Empecé a los siete años en Deportivo San Andrés. Después a los 14 estaba de suplente en la segunda de Ascenso. A los 15 ascendimos a Primera en San Andrés y jugué un año. Luego me compró San Lorenzo de Almagro y estuve hasta los 26 años. Después pasé a Gimnasia y Esgrima y después cerré mi carrera en San Andrés.
LPSC: ¿Por qué abandonaste la actividad?RB: Tuve problemas en una rodilla, de ligamentos cruzados. Hice el último año en Fiat Concord, donde estaba el Tola Cadillac y luego pasaron a Obras. Ahí decidí retirarme e incorporarme en el Instituto Nacional del Deporte para estudiar.
LPSC: ¿Qué opinas del trabajo que se desarrolla en Caleta Olivia con relación al básquetbol?RB: El problema son las escuelas de mini. Hace muchos años que se juega con Comodoro y en la provincia no se trabaja muy bien. Los únicos que sacan jugadores son Truncado y Caleta, porque el resto trae jugadores de afuera para jugar en Primera. No existen las divisiones inferiores y por eso no hay jugadores. El seleccionado juvenil que juega en Truncado, tiene cuatro jugadores de Caleta, tres de Truncado, dos de Río Turbio y uno de Río Gallegos y otro de Puerto Deseado. Se necesitan “lungos”, principalmente.
LPSC: ¿Por eso son importantes estos proyectos que encarás?RB: Claro y Dios quiera que volvamos a dar la tecla en el mini, que es el futuro. Al no tener chicos que empiezan de pequeños, no vamos a tener jugadores de primera.
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