“Van a tener que ir a jugar a Merlo, Florencio Varela y San Justo” - En la reunión, de la que no participaron los presidentes de River y Huracán, el otro club descendido, se definió que el torneo de la B Nacional comenzará el jueves 4 de agosto y River debutará el miércoles 17 de agosto, como todos los equipos que jugaron la Promoción.
Salió de la reunión de la mesa directiva del Nacional B y fue el nexo con la prensa. Norberto “Pocho” Arismendi, gerenciador y hombre fuerte del Deportivo Merlo, quizás el club más chico de la categoría, bajó una sentencia: “Todos me preguntan si River va a ir a jugar a la cancha de Deportivo Merlo. Y yo les pregunto: ¿Por qué no va a ir? River no solo va a tener que ir a Merlo sino también a Florencio Varela, a San Justo y recorrer todo el interior. Admito, también que le va a dar un toque de distinción a la divisional, eso no se puede ocultar, pero no le va a ser nada fácil. Van a enfrentar a jugadores que no conocen y canchas que jamás han pisado. La verdad, no me gustaría estar en la piel de Passarella.
Claro, a pocas horas del descenso, con el “cadáver aún caliente”, la presencia de River en el Nacional B ya comenzó a mover el avispero de las suspicacias, de las sospechas. River seguirá siendo el de “tu grato nombre” pero deberá pasar un año de 38 fechas en la B y recorrer casi 20 mil kilómetros. Algunos recuerdan y comparan el paso de San Lorenzo y Racing por la B pero aquellos tiempos ni remotamente se asemejan a estos.
No será fácil. Y uno de los indicios se vivió el martes por la noche en AFA. River faltó a la cita de la reunión de la divisional. También estuvieron ausentes Huracán e Instituto, pero eso casi ni notó ni preocupó a nadie. River no está cómodo. Lo acucian los problemas, se agravan las denuncias y es como que todo el mundo River quisiera apagar el fuego con un bidón de nafta.
Este Nacional B, incluido River, tiene entre sus participantes a muchos equipos que alguna vez fueron campeones de primera división como Chacarita, Quilmes, Ferro, Huracán y Rosario Central. Y también un duro itinerario para jugar en canchas desconocidas como Deportivo Merlo, Defensa y Justicia y Almirante Brown de San Justo (arregló su continuidad como DT Blas Giunta, un ídolo boquense) y en otras muy difíciles como Atlético Tucumán, Gimnasia de Jujuy, Guillermo Brown de Puerto Madryn, San Martín de San Juan y Chacarita.
Otro detalle, River, que ya se hizo acreedor a varios adelantos de la TV de primera división, pasará a cobrar en el Nacional B siete veces menos que lo que cobraba en primera división. Es decir, de los 30 millones que cobraba, ahora recibirá solo tres millones por año. Por eso, el alerta del presidente de Almirante Brown de San Justo, Juan Antonio Echeverría: “Pedimos y queremos que haya equidad en los ingresos de la categoría”. Para el vicepresidente de Atlanta, Marcelo Paz, cuyo club debutó en el profesionalismo (1931) contra River, “el campeonato pasado fue muy bueno y las posiciones recién se aclararon en los últimos tramos, por eso no hay por qué cambiar el sistema. La presencia de River será muy motivante. Hay clubes que jamás en su vida deportiva jugaron con River.”
Otra voz fue la de Salvador Stumbo, delegado ante AFA de Gimnasia y Esgrima de Jujuy, quien refirió: “No hay que innovar, así como está el torneo, está bien. River deberá acomodarse a las circunstancias. River podrá tener privilegios afuera de la AFA pero en la AFA no los tendrá.”
Para Carlos Coloma, vicepresidente de Quilmes, otro flamante descendido, la presencia de River jerarquizará el torneo pero “deberá sobreponerse de este momento y ubicarse a la altura de la primera B Nacional. Aquí no hay privilegiados. Todos los clubes están en la misma línea de partida. Fue una pena que anoche no vino ningún representante porque quien falta a estas reuniones, después no tiene derecho al pataleo.
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